El lagrimeo es un problema muy frecuente en la población, y aunque no es grave, sí es muy molesto. Aparte de la incomodidad de tener que estar secándose con un pañuelo, lo que puede dificultar muchas actividades sociales, el lagrimeo continuo suele producir irritación de la piel por donde cae la lagrima, generalmente producida por el secado continuo. Además puede dificultar parcialmente la visión, ya que para una visión normal se requiere una lagrima homogénea. Cuando hay un exceso de lágrima en el ojo, se produce una alteración en la visión, que suele ser muy variable, y que típicamente afecta más a la lectura.
El lagrimeo es un problema molesto y muy frecuente que, casi siempre, tiene solución, por lo que es muy importante su valoración por un especialista, que pueda ofrecer la solución más adecuada.
¿Por que puede llorar el ojo?
La producción y eliminación de la lágrima en el ojo se asemeja a un lavabo. El ojo puede llorar por un exceso de producción de lagrima (sale mucha agua por el grifo) o porque la lagrima que se produce, no se elimine bien (tener alguna alteración que dificulta la llegada del agua a las cañerías o las cañerías obstruidas).